El "boom" de consumo colaborativo en los medios

El consumo colaborativo explotó en varios países durante el 2012 y en las primeras semanas de 2013 muchos medios de comunicación se han hecho eco de ello.

El consumo colaborativo explotó en varios países durante el 2012 y en las primeras semanas de 2013 muchos medios de comunicación se han hecho eco de ello.

Consumo colaborativo en España en 2012

Los últimos días de 2012 se publicó un resumen del consumo colaborativo en España (parte I, parte II) con datos muy interesantes:

  • En lo relativo a las inversiones, sin llegar a nivel de inversiones en Francia, ha sido un año positivo

Los medios se hacen eco

Todo este movimiento no ha pasado desapercibido. Cada fin de semana Carlos Fresneda escribe en El Mundo artículos acerca de "Ideas ante la crisis". Ya había realizado entrevistas a Rachel Botsman, Roo Rogers o Benita Matoksfa entre muchos otros interesantes artículos. El pasado fin de semana fue el turno de ConsumoColaborativo y OuiShare. El articulo fué compartido miles de veces en la redes sociales y generó un pico de tráfico importante en todas aquellas webs enlazadas.

Al lunes siguiente el periódico ABC se podía leer otro fantástico artículo, de Luís P. Arechderra, que empieza con una curiosa referencia a un episodio de Futurama e incluye declaraciones de Concepción Gabaldón, directora de Área 31, un espacio de innovación y emprendimiento del Instituto de Empresa (IE) Business School en Madrid.

En otras partes de Europa y también América Latina

Estamos muy habituados a que se hable de consumo colaborativo en medios anglosajones. De manera sincronizada el consumo colaborativo se ha hecho visible en medios de Alemania (Der Spiegel), Italia (La Reppublica), Portugal (Publico) Brasil (agencia IPS y Envolverde) y en Colombia (La República)

Aprender de las críticas

El interés y las reacciones en la redes sociales ante la presencia del consumo colaborativo en los medios de comunicación generalistas demuestra que las diversas propuestas de consumo colaborativo ofrecen beneficios que resultan obvios para una gran mayoría de la población. A fin de cuentas estamos hablando de aplicar en sentido común y dejar que creer que el sin sentido del hiperconsumo del siglo XX podía ser una modo de vida sostenible. También es interesante ver como los comentarios de aquellos más críticos con estas nuevas ideas se centran en

  • Temas de generación de confianza, legalidad, seguros, etc. Los proyectos ya están realizando una fantástica labor para reducir estas barreras de entrada pero esta claro que hay que comunicarlo aún mejor.
  • Querer segmentar(bueno/malo) los proyectos que funcionan sin dinero (regalos, trueques, favores, etc.) de aquellos que permiten a los "peers" generar ingresos a partir de compartir. Nosotros creemos que ambos tipos de proyecto aportan su granito de arena a la economía de la colaboración y que cubren necesidades distintas.

Y vosotros ¿qué pensáis?

Imagen de portada de Ceanerob en Flickr con licencia Creative Commons BY-NC-ND