El pasado miércoles tuvo lugar el evento “Blockchain: desintermediación de los negocios” en el espacio Bertelsmann de Madrid. Organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección, la jornada iba dirigida principalmente a líderes empresariales para dar a conocer esta tecnología y sus posibilidades.
El mejor estado posible es una red
Tras la presentación del evento, Carlos Barrabés, presidente del grupo que lleva su apellido, comenzó hablando de la eficiencia de la desintermediación en los negocios, los nuevos jugadores y los nuevos modelos que están surgiendo al calor de las recientes y disruptivas tecnologías. La tecnología blockchain y la tormenta tecnológica perfecta, en cuyo epicentro nos situamos, coparon su presentación. Dicha tormenta, según el mismo Barrabés, estaría compuesta por las siguientes tecnologías:
- El Cloud es la tecnología de la Globalización
- El IoT es la tecnología de la Fisicalización
- El 5G es la tecnología de la Ubicuidad
- El Big data es la tecnología de la Personalización
- La Realidad virtual es la tecnología de la Experiencia
- La Blockchain es la tecnología de la Identidad
- La IA es la tecnología de la Automatización
- La Seguridad es la tecnología de la Seguridad
Por cierto, ¿estamos seguros de que blockchain es "identidad"? ¿qué tal "transparencia", "descentralización" o "confianza"?
Una herramienta de desintermediación que aporta seguridad y eficiencia
Alberto Gómez Toribio tomó el relevo para explicar qué es blockchain. Quien fundase la primera empresa basada en el intercambio P2P de bitcoins, Coinffeine, cuyo capital social inicial se depositó íntegramente en esta moneda, dio un repaso por el recorrido de esta tecnología, basándose en su experiencia en el uso de la misma. La idea principal fue que se trata de “una herramienta de desintermediación que aporta seguridad y eficiencia”. Tras una charla de Mario Robredo, Gerente Senior de Innovación y Nuevos Negocios de Indra, sobre la aplicación de la tecnología blockchain en la banca y la mesa posterior, con representantes del Banco Santander y de Telefónica, quedaba claro que la idea central de la primera parte del evento era cómo utilizar esta tecnología para crear nuevos servicios o eliminar intermediarios para hacer sus modelos de negocio más rentables.
Transactive Energy y otras utilidades
Tras la preceptiva pausa, Jorge Lang, de Intel, aportaba más luz con otras utilidades reales de esta tecnología. Una de las que más llamó la atención fue la referida a los sistemas energéticos apoyados en redes P2P y gestionados a través de la cadena de bloques. Bajo el nombre de Transactive Energy, mostraba un sistema de gestión donde la eficiencia energética combina perfectamente con la producción ciudadana y la distribución de los excedentes dentro de una red.
La blockchain y las cooperativas
El mismo Jorge Lang moderó una potente mesa con Carlos Kuchkovsky, CTO de kickstart team (BBVA), y Sandra Fernández Curias, Global Business Development Manager de Telefónica. En esta mesa se tocaron temas muy interesantes y más relacionados con el papel de las personas en el uso y aplicación de la tecnología blockchain. Sandra Fernández defendió el uso de una cadena de bloques única, global, pública y transparente para dar sentido al origen de esta herramienta, frente a las diferentes “blockchains” privadas como herramienta de distribución limitada tan sólo a un número cerrado de participantes. Por su parte, Carlos Kuchkovsky habló de los usos que podrían afectar a los diferentes sistemas empresariales. En concreto, hizo una certera afirmación sobre su potencial aplicación en las cooperativas, gracias a su naturaleza distribuida y descentralizada.
#Blockchaincomo herramienta clave para el despegue del#IoTa través de#smartcontractsen#blockchainmadridpic.twitter.com/cgUZLHytDV— Sara Rodríguez Marín (@ChuritaSRM)2 de marzo de 2016
La empresa tradicional, ¿oportunidad o amenaza para la blockchain?
Si bien es cierto que soy partidario de la integración de lo tradicional en lo disruptivo como modo de naturalizar y hacer extensibles las innovaciones, tras este evento no tengo claro si la empresa tradicional, en su legítimo ánimo por eliminar intermediarios, va a hacer más sencilla la transición hacia sistemas descentralizados, distribuidos y transparentes o más bien va a asimilarlos bajo sus valores y a hacer que algo hecho para que las personas controlen y participen en todos los aspectos de la sociedad pierda su esencia por el camino. ¿Es posible un equilibrio en este sentido? En buena parte dependerá de lo que aportemos los que apostamos por el primer sistema, es decir, el descentralizado. Aunque como bien sabemos en OuiShare, no será sencillo de aplicar. En este evento no he dejado de escuchar afirmaciones sobre nuevos productos bancarios, nuevas formas de controlar el uso que se le da a bienes asegurados por parte de los usuarios como prueba en caso de conflicto con las compañías aseguradoras y formas más eficientes de gestionar la logística empresarial. Se ha echado en falta el uso que se le puede dar a esta tecnología para permitir la participación ciudadana. Participación que se ha demostrado muy valiosa, también en términos económicos para las empresas, tanto tradicionales como del sector colaborativo. La jornada se ha enfocado de una manera principalmente mercantil, dejando de lado el gran poder de esta tecnología, que quizás, sólo quizás, ha llegado para quitar de en medio a muchas de estas empresas que quieren eliminar intermediarios haciendo uso de ella. Si pensamos que blockchain va a suponer una revolución similar a la que produjo internet en su momento, no olvidemos los cambios que ha producido y sigue produciendo la red a todos los niveles, y que muy probablemente se volverán a repetir con la blockchain pero de manera casi imprevisible. Como bien dice este artículo "internet no es un martillo con el que seguir trabajando con los clavos de siempre". Imaginad una herramienta que aún no sabemos muy bien lo que es y para lo que sirve y mucho menos conocemos su potencial. Es difícil creer que blockchain sirva para repetir lo de siempre cuando ya lo de siempre ha cambiado, y más en ciertos sectores muy interesados en esta tecnología.
Es difícil creer que blockchain sirva para repetir lo de siempre cuando ya lo de siempre ha cambiado
Veremos quién "amenaza" a quién. Los que llevamos tiempo en la economía colaborativa y algún tiempo también oyendo hablar sobre blockchain, vemos cómo cada vez más lo tradicional empieza a mover ficha en el uso de una tecnología que se anuncia como una nueva revolución. Lo que está claro, como leí hace no mucho, es que ya hay más gente con traje y corbata en los eventos de blockchain que con jeans y capucha. Quizás es hora de comenzar a dar uso extensivo y práctico a algo que podría estar llamado a corregir algunas de las quejas más extendidas dentro de la economía colaborativa en cuanto a descentralización, distribución y transparencia de las plataformas se refiere.